Los residentes en la comunidad de
Jengibre reclaman que se le de continuidad a la construcción de la carretera,
desde Caribe hasta salir al Distrito de Jayaco y dicen que de no ser escuchado
se lanzarán a una huelga por tiempo indefinido.
Por MARINO BAEZ
JENGIBRE, Bonao.- A pesar de ser una comunidad productiva de ganado
vacuno, café, cacao y otros rubros diversos, los residentes en la comunidad de
Jengibre, ubicada a escasos kilómetros de Bonao, municipio cabecera de la
provincia Monseñor Nouel, está pasando por la mas difícil situación para
trasladar sus frutos, debido a la gran descomposición que presenta su única vía
de comunicación.
Los residente en esta laboriosa comunidad que alberga en sus alrededores
las empresas Falcondo, Cigar Family, Pollo Cibao y una cantera de invernaderos,
han visto fallecer a varios de sus hijos por ahogamiento, tras las crecidas de ríos,
cañadas y arroyos, que muchas veces no
les permiten cruzar a la zona, luego de desarrollar amplias jornadas de
trabajo.
Desde la entrada de Caribe, la carretera de Jengibre comunica al
Distrito Municipal de Jayaco, hasta la autopista Duarte (La Gran Parada), una vía
que podría servir para incursionar en actividades ecoturística, lo que contribuirá
al soporte para reducir el desempleo de las comunidades que bordean el entorno
de la provincia.
Monseñor Nouel es la Quinta Provincia Ecoturística del país, sin
embargo, ni las autoridades provinciales y municipales y mucho menos las
empresas que están en el entorno de la comunidad de Jengibre, se han preocupado
por gestionar y hacer inversiones que contribuyan con el desarrollo sostenible de
la zona.
Esta comunidad pertenece al municipio de Bonao y el sindico Alberto
Marte, al igual que las demás autoridades de la provincia, nunca la han
visitado, porque sólo recuerdan a sus habitantes cuando están en campaña, al
extremo de que en una oportunidad el Consejo para el Desarrollo de la Provincia
le aprobó la construcción de un puente de cajón y luego de ser presupuestarlo
el dinero desapareció por arte de magia, según afirman dirigentes comunitarios.
“Esta cañada es el principal dolor de cabeza para los habitantes de la
comunidad de Jengibre, porque cuando llueve, el que está del lado de Bonao,
tiene que amanecer donde algún familiar y que está en nuestra comunidad se
tiene que quedar aquí, o esperar que baje la creciente, porque es bastante
peligrosa”, dijo el dirigente comunitario, Alcedo Plasencia.
Según los argumentos de Plasencia, el principal camino vecinal que
comunica a más de 15 comunidades campesinas de la zona está intransitable lo
que no permite que puedan sacar sus productos agrícolas a los mercados e
imposibilita el traslado de los enfermos a la ciudad, porque los propietarios
de vehículos temen que se les rompan debido a su progresivo deterioro.
El presidente de la Asociación de Agricultores "El
Progreso" de la comunidad de Jengibre, dijo que esta situación no les
permite transitar en vehículos, porque se quedan atascados en los hoyos
por el lodo que existe en épocas de lluvias.
“Los caminos vecinales de Caribe, Jengibre, Hato Nuevo, El Verde, entre
otras comunidades están en condiciones deplorables”, sostuvo el dirigente
comunitario y presidente de asambleas, al tiempo de llamar a las autoridades
para que se apiaden de los residentes de la comunidad y gestionen la construcción
de la carretera, o de lo contrario se lanzarán a una huelga por tiempo
indefinido.
De acuerdo con Plasencia, recientemente los residentes de la comunidad
de Jengibre visitaron a al Ministro de Obras Publicas, quien según dijo, les prometió
su construcción, sin embargo todavía no han recibido informaciones de las
autoridades para la pronta solución del problema.
Considera que los residentes de Jengibre, comunidad que ha crecido estrepitosamente en cuanto producción, está a la espera de que se cumpla con la promesa de construir dicha vía de comunicación, porque es de la única forma que sus habitantes pueden vivir con tranquilidad.
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