El pelotero dominicano David Ortiz, de los Medias Rojas, confesó al periódico Boston Herarld habar recibido de su madre “una valiosa lección acerca de la aceptación”, por lo que si en esta temporada un compañero de equipo se declarara homosexual él lo aceptaría sin problemas y propiciaría un ambiente acogedor.
Recordando la lección materna, Ortiz reveló haber tenido un amigo de infancia “que cuando tenía trece años todos sabíamos que era gay. Él siempre estaba hablando con mi madre, diciéndole todo. Estaban muy cerca, y fue mi madre quien me enseñó a amar a las personas por lo que son”.
Las declaraciones del pelotero de Grandes Ligas se produjeron el pasado 25 de febrero en una entrevista con el Boston Herald concedida al periodista Steve Buckley, al día siguiente de que Jason Collins jugara un partido en la NBA, con la que firmó un contrato de diez días con los Nets e ingresara en el minuto 11 del juego dándole la victoria al equipo frene a los Lakers, 108-102.
Collins confesó su orientación sexual en mayo del año pasado en un artículo escrito para la revista Sport Illustrated.
"Estoy bastante seguro de que su confesión pública y haber dicho lo que dijo le ha ganado confianza”, dijo Ortiz en su entrevista al Boston Herald.
“Creo que como ser humano, como personas, tenemos que aceptar a los otros como son. No importa de dónde vienes, de qué color eres. No soy quién para juzgar a nadie”, puntualizó el pelotero dominicano.
Ortiz dejó en claro, sin embargo, que hablaba como individuo, no como portavoz del equipo. Cuando el entrevistador le preguntó si Collins sería bienvenido en los Medias Rojas si fuera un jugador de béisbol, respondió: “No sé. Esa es una pregunta que todo el mundo tiene que responder por su cuenta. En mi caso, me encanta la gente de la manera en que son".
"Tengo amigos gáis. Tenemos muy buenas relaciones porque nos respetamos mutuamente. No es algo que uno elige ser. No es como decir ‘quiero ser pelotero’ o ‘quiero ser jugador de baloncesto’. Es algo con lo que se nace y todo el mundo tiene que aceptar eso. Es mi forma de ver las cosas, me encanta la gente como es. Especialmente si usted es honesto consigo mismo. ¿Sabes lo que estoy diciendo?”, dijo Ortiz al Boston Herald.
Para el grandes ligas, la discriminación de los gáis es impropia de las personas del siglo XXI, por lo que hay terminar con ella. Gracias a su madre, dice el cronista, Ortiz lo superó hace muchos años.
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