Combatientes islamistas dejaron en libertad a unos 300 hombres kurdos que habían sido capturados durante horas en el noroeste de Siria.
Al parecer, los hombres fueron secuestrados mientras viajaban en autobús desde Afrin hacia la ciudad de Aleppo.
Representantes del Partido Kurdo de Unión Democrática (PYD) responsabilizaron del secuestro al grupo Jaysh al-Islam (Ejército del islam) pero esto no fue confirmado.
Los rehenes kurdos fueron liberados en un supuesto intercambio de prisioneros.
Según informes de prensa, los hombres fueron retenidos en una localidad de la provincia de Idlib.
Un portavoz del PYD informó que los secuestradores pidieron a cambio la liberación de tres militantes detenidos por los kurdos en Afrin.
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